PORFIRIO BARBA JACOB Y SUS DIAS DE BOHEMIA
Por el profesor Libardo Vargas Celemín[1]:
Uno de los poetas más vivenciales, pero también mas polémicos de nuestra literatura, es sin lugar a dudas Porfirio Barba Jacob, un trashumante quien precisamente llega a Ibagué por azar y se queda aquí por unos pocos meses, dedicado especialmente a la bohemia y a dejar que sus sentidos Ie prodigaran la dicha que siempre estaba buscando.
Miguel Angel Osorio, luego de un lío que tuvo en la ciudad de Manizales, se acordó que una hermana suya vivía en Ibagué y se vino hasta aquí en su búsqueda.
Fácilmente encontró a Doña Mercedes Osorio Castro, quien vivía en un enorme caserón del barrio La Pola y recibió afectuosamente al poeta. El esposo de doña Mercedes era el concesionario de la lotería y había adquirido una enorme fortuna haciendo trampas con los números ganadores.
Pronto Barba Jacob participa de este carrusel y le es entregado un billete para que reclamara el premio para una de sus sobrinas, pero Barba Jacob se dedica a compartir los diez mil pesos del premio con los bohemios de la ciudad, dura varios días ebrio y finalmente tiene que irse de la ciudad, cuando ya ninguna disculpa satisface a su sobrina.
Barba Jacob tuvo la oportunidad de montar un periódico financiado por su cuñado, sin embargo no se interesó demasiado. Después tendría su propio periódico en la ciudad de Cali y ante el triunfo de la primera edición, se dedica a beber y se gasta la base económica que tenía. Todas estas acciones lo colocan en el único camino posible para sus aspiraciones, el exilio y así lo hace.
Esta corta temporada que pasa Barba Jacob en Ibagué no deja ninguna huella, ni para sus escritos (existen tan solo dos poemas, que tienen como referencia la ciudad, pero no figuran en sus antologías), ni para la vida cultural de la ciudad, lo único que logra el poeta con la reconciliación con su hermana, es que esta lo haga pasar por el moribundo de su esposo y tenga que testar ante un notario público y como recompensa recibe el pasaje que lo alejará de esta patria, a la que jamás regresará.Ver Jorge Isaacs y su amigo Emiro Kastos
[1] POETAS Y NOVELISTAS COLOMBIANOS DE PASO POR IBAGUÉ. Aquelarre. Revista semestral del Centro Cultural de la Universidad del Tolima. No1. Edición Enero –Junio 2002
Uno de los poetas más vivenciales, pero también mas polémicos de nuestra literatura, es sin lugar a dudas Porfirio Barba Jacob, un trashumante quien precisamente llega a Ibagué por azar y se queda aquí por unos pocos meses, dedicado especialmente a la bohemia y a dejar que sus sentidos Ie prodigaran la dicha que siempre estaba buscando.
Miguel Angel Osorio, luego de un lío que tuvo en la ciudad de Manizales, se acordó que una hermana suya vivía en Ibagué y se vino hasta aquí en su búsqueda.
Fácilmente encontró a Doña Mercedes Osorio Castro, quien vivía en un enorme caserón del barrio La Pola y recibió afectuosamente al poeta. El esposo de doña Mercedes era el concesionario de la lotería y había adquirido una enorme fortuna haciendo trampas con los números ganadores.
Pronto Barba Jacob participa de este carrusel y le es entregado un billete para que reclamara el premio para una de sus sobrinas, pero Barba Jacob se dedica a compartir los diez mil pesos del premio con los bohemios de la ciudad, dura varios días ebrio y finalmente tiene que irse de la ciudad, cuando ya ninguna disculpa satisface a su sobrina.
Barba Jacob tuvo la oportunidad de montar un periódico financiado por su cuñado, sin embargo no se interesó demasiado. Después tendría su propio periódico en la ciudad de Cali y ante el triunfo de la primera edición, se dedica a beber y se gasta la base económica que tenía. Todas estas acciones lo colocan en el único camino posible para sus aspiraciones, el exilio y así lo hace.
Esta corta temporada que pasa Barba Jacob en Ibagué no deja ninguna huella, ni para sus escritos (existen tan solo dos poemas, que tienen como referencia la ciudad, pero no figuran en sus antologías), ni para la vida cultural de la ciudad, lo único que logra el poeta con la reconciliación con su hermana, es que esta lo haga pasar por el moribundo de su esposo y tenga que testar ante un notario público y como recompensa recibe el pasaje que lo alejará de esta patria, a la que jamás regresará.Ver Jorge Isaacs y su amigo Emiro Kastos
[1] POETAS Y NOVELISTAS COLOMBIANOS DE PASO POR IBAGUÉ. Aquelarre. Revista semestral del Centro Cultural de la Universidad del Tolima. No1. Edición Enero –Junio 2002
Ciao da Maria
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